Martina Leiva rindió la PAES y quedó seleccionada en la carrera de psicología en la universidad estatal de O’Higgins.

En una emotiva jornada en el Campus Rancagua de la Universidad de O’Higgins (UOH), Martina Leiva Rodríguez, de 18 años, materializó su ingreso a la carrera de Psicología, convirtiéndose en la primera egresada de la Escuela Hospitalaria Santa Cruz en ingresar a la universidad.

Martina, la menor de cinco hermanos, enfrentó desde los cinco meses de vida el diagnóstico de atrofia muscular espinal AME1, una condición genética que afecta las neuronas motoras. En el año 2008 cuando el Ministerio de Salud implementó un programa de hospitalización domiciliaria, Martina fue una de las primeras beneficiarias, y durante los años 2022 y 2023 cursó tercero y cuarto medio en la Escuela Hospitalaria del Hospital de Santa Cruz, donde recibió acompañamiento psicoeducativo.

Claudio Miranda, director de la Escuela Hospitalaria Santa Cruz, enfatiza el papel de la institución en este proceso afirmando que “nosotros como escuela hospitalaria somos un espacio educativo seguro e inclusivo. Es importante destacar que Martina postuló por la vía regular, no por su discapacidad, y quedó seleccionada por su puntaje. Gestionamos reuniones previas a la matrícula para asegurarnos de que recibiría las mismas adecuaciones y flexibilidad”. Desde la escuela, con sede en el Hospital de Santa Cruz, expresaron a través de sus redes sociales que “estamos muy contentos y orgullosos, hoy la acompañamos con Catalina y Claudio del aula hospitalaria, junto a su madre, sus tens y María Paz Moreno que nos ayudó a llegar a las personas indicadas que apoyarán a Martina en todo su nuevo desafío en la educación superior. Hacemos visible la historia de Martina a petición de ella y su propia familia que quieren que sirva de ejemplo para abrir caminos seguros e inclusivos para que más personas a futuro puedan cumplir su sueño de acceder a la universidad”.

Martina, emocionada por el recibimiento en la universidad, compartió sus expectativas con la prensa expresando que “quiero empezar pronto, aprender y en cinco años titularme. También quiero ayudar a las personas a cumplir sus sueños, a motivarlos y abrir la puerta a otras personas con discapacidad para que se den cuenta de que se puede”.

Su madre, Mónica Rodríguez, con orgullo y emoción manifestó que “este recibimiento que nos hicieron fue muy lindo. Estoy orgullosa de estar acá; tenía mis preocupaciones, pero se están dando todas las cosas y con mucha voluntad”.

Martina Leiva Rodríguez no solo es un ejemplo de valentía y superación personal, sino que también representa el triunfo de la inclusión desde la salud y la educación pública, marcando un camino seguro para otros estudiantes de escuelas hospitalarias que buscan continuar sus estudios en la educación superior universitaria.