Si bien la representante de O’Higgins lamentó que la paralización de las trabajadoras provocara la suspensión de clases en comunas como Machalí, aseguró que la escasez de productos en los establecimientos estaría perjudicando directamente a los estudiantes. 

Junto con solidarizar con las manipuladoras de alimentos de la Región de O’Higgins que esta mañana protestaron por la falta de insumos en sus respectivos establecimientos educacionales, la diputada por el Distrito 15, Natalia Romero, decidió oficiar al Ministerio de Educación y a la Junta Nacional de Auxilio Escolar y Becas (Junaeb), de manera que puedan informar sobre las graves denuncias que se realizaron y el eventual incumplimiento en que estarían incurriendo algunas empresas de la zona.

Al respecto, la parlamentaria lamentó que dichos problemas -asociados a la falta de insumos y de alimentos- se vengan arrastrando desde el año pasado, puesto que “el costo lo terminan pagando los estudiantes más vulnerables y de escasos recursos, que están recibiendo una menor ración de alimentos y que, además, sus colegios se ven en la obligación de suspender las clases presenciales”.

“Hemos decidido oficiar al Ministerio de Educación y a la Junaeb para que tomen conocimiento de las graves denuncias realizadas por las manipuladoras de alimentos de la Región de O’Higgins, que no sólo dieron cuenta de la falta de insumos que tienen para desempeñar sus labores, especialmente en las cocinas, sino que también advirtieron una escasez de alimentos que termina perjudicando directamente a los niños y adolescentes”, señaló la diputada por el Distrito 15, quien agregó que “es fundamental que las autoridades den respuesta a esta situación y ejerzan todas las acciones que sean necesarias contras las empresas que tienen a cargo la entrega de este servicio de alimentación”.

En esa línea, si bien la diputada Romero lamentó que dicha paralización haya provocado que los colegios y liceos municipales de algunas comunas, como Machalí, tuvieran que reducir su jornada escolar durante esta jornada, sostuvo que “no debemos olvidar que la principal demanda de las manipuladoras de alimentos es la falta de productos para los propios estudiantes”, de manera que acotó que “sus demandas tienen directa relación con la calidad de los alimentos que están recibiendo los alumnos, que al parecer no se ajustaría a lo que ha establecido el ministerio”.

“A todas luces, aquí estamos frente a un grave incumplimiento de parte de la o las empresas que tienen a su cargo la entrega del servicio de alimentación en los colegios de nuestra región. Y por eso es indispensable que el Ministerio de Educación, a través de la Junaeb, pueda intervenir lo antes posible, porque es la alimentación de los niños y jóvenes más vulnerables de O’Higgins la que está en juego”, manifestó la parlamentaria, quien finalmente insistió en que “tanto las manipuladoras de alimentos como los apoderados y los estudiantes necesitan de una respuesta clara y concreta”.

“Es urgente que las autoridades nacionales y regionales del ministerio intervengan en este asunto, den respuesta a las graves denuncias que hicieron las manipuladoras de alimentos y evitemos, también, que se sigan perdiendo clases producto de esta situación”, insistió la diputada Romero.